"Gracias Carlos por hacer de tu experiencia algo positivo y que abre y abrirá nuevos horizontes y perspectivas, no solo a los que padecen de este mal, sino a todas aquellas personas que los rodean y son su apoyo y alimento espiritual.
Por desgracia he estado muy cercana a personas que han padecido de cancer, y he visto a algunas triunfar como Samurais, y otros grandes guerreros perder la batalla, pero en el camino encontrar una nueva perspectiva de la vida y lo más importante en ella, la importancia de gente que amamos. En la locura diaria, nuestro cuerpo es el que más olvidado tenemos. El no es un ser inerte, es sabio, esta vivo, es una maquina perfecta, que se queja y se rebela cuando es maltratada o abusada. Nuestra alimentación, stress, falta de sueño, etc, son los ingredientes que lo saturan, y probablemente el cancer, es uno de los pilotos rojos de alerta más extremos, que tiene para quejarse y llamar la atención. Una vez que se enciende, nuestra perspectiva de la vida, como la teníamos asumida hasta ese momento se detiene. Analizamos las prioridades de nuestro entorno, y de repente, lo que antes era más insignificante se convierte en un tesoro.
Gracias a los avances en la medicina, en la medicina alternativa, y la información al alcance de todos a través del internet, las armas con las que vamos a la batalla, han cambiado. Pero lo más fundamental, es comprender que tenemos que aliarnos con nuestro cuerpo, para vencer física y emocionalmente el nuevo reto que se presenta. El camino es largo y pantanoso, pero también lleno de triunfos, y como nunca se aprende ninguna lección valiosa cuando lo estamos pasando bien, esta será una lección que incluso pasaremos a otras generaciones.
Carlos es el mejor ejemplo de esos triunfos, no solo a nivel personal, sino que con su experiencia ha regado su semilla de optimismo, para que se siembre en un campo infinito y que esa lluvia lo fertilice y se contagie por todo el mundo.
Gracias Carlos y gracias a todos por compartir vuestra experiencia"
